Los herederos del consumo
Los jóvenes de todo el mundo generan un consumo de 750.000 millones de euros al año y de ellos depende, en muchas ocasiones, que una marca de ropa tenga un futuro brillante o por el contrario caiga en el olvido. Pero, ¿está el consumo a salvo de estos devoradores de tendencias, tecnologías y modas? ¿Ha cambiado el consumo de la juventud durante la crisis? Y, lo más importante, ¿cómo será el consumidor teen
El 66% de los encuestados están satisfechos con su asignación mensual de, aproximadamente, 50 euros
La fundación Creafutur (cuyos patronos son la Generalitat de Catalunya y Esade) ha realizado un estudio para saber cómo son los hábitos de consumo de los jóvenes de 8 países del mundo: España, Brasil, ARGENTINA, Estados Unidos, Francia, Japón, México, Reino Unido y China.
El estudio divide a los jóvenes en dos grupos, que se podrían clasificar como pre-adolescentes, en una edad comprendida entre los 12 y 14 años, y los adolescentes o teens, de 15 a 19 años.
En una comparación del consumo que realizaba la juventud hace veinte años, el estudio habla sobre los jóvenes de los noventa. Entonces existía una sociedad más tolerante y receptiva a este sector, señala el informe. Fue en aquel momento cuando el teen empezó a comprar solo y a ser más independiente gracias a una asignación económica que podía invertir en lo que quisiera, algo que, a día de hoy, se sigue reflejando en la sociedad actual más joven.
Los teen de los ocho países encuestados reciben una mensualidad de, aproximadamente, 50 euros. El 66% de los encuestados están satisfechos con su asignación mensual pero, en realidad, su gasto total es de 155 euros al mes, cifra que financian sus padres.
Un 17,5% de la población mundial pertenece al sector teen y ellos deciden en qué invierten su dinero, que ha sido facilitado por los padres. Un total de 26 euros es lo que el joven destina a consumir ropa, frente a los 24 euros que gasta en comida o los 20 euros que invierte en tecnología.
El estudio divide a los jóvenes en dos grupos, que se podrían clasificar como pre-adolescentes, en una edad comprendida entre los 12 y 14 años, y los adolescentes o teens, de 15 a 19 años.
En una comparación del consumo que realizaba la juventud hace veinte años, el estudio habla sobre los jóvenes de los noventa. Entonces existía una sociedad más tolerante y receptiva a este sector, señala el informe. Fue en aquel momento cuando el teen empezó a comprar solo y a ser más independiente gracias a una asignación económica que podía invertir en lo que quisiera, algo que, a día de hoy, se sigue reflejando en la sociedad actual más joven.
Los teen de los ocho países encuestados reciben una mensualidad de, aproximadamente, 50 euros. El 66% de los encuestados están satisfechos con su asignación mensual pero, en realidad, su gasto total es de 155 euros al mes, cifra que financian sus padres.
Un 17,5% de la población mundial pertenece al sector teen y ellos deciden en qué invierten su dinero, que ha sido facilitado por los padres. Un total de 26 euros es lo que el joven destina a consumir ropa, frente a los 24 euros que gasta en comida o los 20 euros que invierte en tecnología.
El 43% de los jóvenes no compran por Internet ya que les proporciona poca fiabilidad
La ropa, la moda y las tendencias es el sector más importante en los ocho países encuestados , ya que según recoge el estudio, esto les hace mostrar su identidad.
El joven actual, en su mayoría, no compra por Internet: es una plataforma que utiliza para obtener información del producto y posteriormente adquirirlo en el establecimiento. Este dato sorprende, ya que el comercio electrónico está creado para las nuevas generaciones, pero más sorprende es saber que sólo un 33% de los jóvenes españoles encuestados consume marcas de ropa e invierte más dinero en comprar producto de calidad.
El 43% de los jóvenes, por tanto, no compran por Internet ya que les proporciona poca fiabilidad. En España, el porcentaje se incrementa hasta un 60% de los jóvenes, que no quieren comprar por comercios electrónicos.
El joven actual, en su mayoría, no compra por Internet: es una plataforma que utiliza para obtener información del producto y posteriormente adquirirlo en el establecimiento. Este dato sorprende, ya que el comercio electrónico está creado para las nuevas generaciones, pero más sorprende es saber que sólo un 33% de los jóvenes españoles encuestados consume marcas de ropa e invierte más dinero en comprar producto de calidad.
El 43% de los jóvenes, por tanto, no compran por Internet ya que les proporciona poca fiabilidad. En España, el porcentaje se incrementa hasta un 60% de los jóvenes, que no quieren comprar por comercios electrónicos.
La tendencia global llevará a estos jóvenes a, en un 30%, querer adquirir producto fabricado en su país
El teen de 2020¿Cómo será el consumidor teen en 2020? Según el estudio de Creafutur, continuarán las tendencias globales del consumo y los jóvenes funcionarán por compras impulsivas de producto más asequible y funcional. El patrón de consumidor “busca-gangas” también se reflejará en la sociedad de entonces.
Dentro de diez años habrá dos tipos de tendencias de consumo, y se podrán dividir en dos grupos: teens, que vivirán en países industrializados y mantendrán el mismo gasto de hoy día para el consumo de ropa y tecnología; y los teens de países emergentes, en los que se notará un cambio de prioridades, consumiendo más en calidad de vida que en producto.
La tendencia global llevará a estos jóvenes a, en un 30%, querer adquirir producto fabricado en su país, aunque en el caso español la cifra cambia, ya que sólo un 22% está a favor de esta afirmación.
Los jóvenes del futuro no serán tan distintos a los que hoy en día existen en la sociedad, sólo que se perfilará un joven que quiera comprar productos que realmente necesite, por lo tanto más consecuente, más comprometido con su país (en el caso de la fabricación) y un buscador de ofertas nato, que es el perfil de nuevo consumidor que está creando la coyuntura económica.
Dentro de diez años habrá dos tipos de tendencias de consumo, y se podrán dividir en dos grupos: teens, que vivirán en países industrializados y mantendrán el mismo gasto de hoy día para el consumo de ropa y tecnología; y los teens de países emergentes, en los que se notará un cambio de prioridades, consumiendo más en calidad de vida que en producto.
La tendencia global llevará a estos jóvenes a, en un 30%, querer adquirir producto fabricado en su país, aunque en el caso español la cifra cambia, ya que sólo un 22% está a favor de esta afirmación.
Los jóvenes del futuro no serán tan distintos a los que hoy en día existen en la sociedad, sólo que se perfilará un joven que quiera comprar productos que realmente necesite, por lo tanto más consecuente, más comprometido con su país (en el caso de la fabricación) y un buscador de ofertas nato, que es el perfil de nuevo consumidor que está creando la coyuntura económica.
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